Palabras homófonas y homógrafas

Escribir sin errores es importante porque un uso inadecuado de una letra o la falta de un acento puede dar lugar a interpretaciones equivocadas, por ejemplo: no es lo mismo decir: “- Pablo calló”; que decir: “- Pablo cayó.” O decir: “- Tendrías que ver un cayo”; a decir: “- Tendrías que ver un callo.” Muchas veces, dos palabras que suenan igual al oído se escriben diferente y además tienen distinto significado. En este caso se dice que las palabras son homófonas. Algunos ejemplos: Por otra parte, las palabras homógrafas (también llamadas polisémicas) son aquellas que aun escribiéndose igual, tienen más de un significado. Por ejemplo: "- Pedro está en el banco". Aquí podríamos preguntar si Pedro está sentado en un banco de plaza, en espera para entrar a jugar el partido o en una institución bancaria. La correcta escritura de las palabras y la contextualización de su significado nos ayuda a evitar malentendidos en la comunicación. Por eso a continuación vamos a...